Cómo restaurar una mecedora de madera antigua

En nuestra Academia Bruguer nos atrae almacenar los muebles que poseemos en el hogar que frecuentemente no utilizamos. Usando el poder transformador del color y la pintura, tenemos la posibilidad de ofrecer una segunda vida a estos elementos, logrando siempre y en todo momento geniales desenlaces y las piezas ornamentales mucho más auténticos.

Esta vez vamos a volver a poner una vieja mecedora, ofrecerle un lavado de cara y convertirla completamente. ¡Vamos para allí!

Índice
  1. ¿Por qué razón volver a poner sillas de madera?
    1. Si la mecedora se emplea frecuentemente, debemos llevar a cabo lo siguiente:

¿Por qué razón volver a poner sillas de madera?

La sensación de tener nuevos muebles o sillas es verdaderamente exitosa, pero en ciertos casos los materiales con los que están fabricadas las novedosas sillas, o la manera que tienen, no van a juego con el resto de muebles de tu hogar.

Volver a poner sillas viejas es la forma de tener muebles absolutamente renovados, sin la necesidad de adquirirlos.

Aquí les enseño la reja que iremos a reemplazar, la tenemos la posibilidad de obtener en Leroy Merlin o en cesterías o mimbrerías y ahora está tejida, hoy día cuesta 20€ para una parte de 50 x 50 cm quiere decir que nos ofrece el taburete de solo una silla, para las mecedoras hay que obtener un patrón mucho más grande por el hecho de que esto en general no es bastante.

Si la mecedora se emplea frecuentemente, debemos llevar a cabo lo siguiente:

  1. Cogemos una lima, no grosísima, y la pasamos por todas y cada una las ubicaciones donde apreciemos alguna imperfección en la madera, así sea una mácula de pintura o una mella adherida.
  2. En este momento con una lima considerablemente más fina, continuamos a remover cualquier resto de polvo que hayamos dejado mientras que suprimimos las deficiencias precedentes.
  3. Ahora pasamos un cepillo de mimbre por la área de nuestra mecedora para ofrecerle la limpieza final.
  4. En este momento debemos colorear nuestra silla, preferentemente con pintura en aerosol a partir de tiza. Esta clase de pintura es particular para estos trabajos por el hecho de que se adhiere mucho más de forma fácil a la área de la madera. Además de esto, es una manera de lograr que el acabado de la pintura sea mucho más traje que usando una pintura mucho más usual y clásico.
  5. Lo último sería barnizar toda la área de nuestra mecedora, para ofrecerle un toque de brillo y brillo, y eludir que la pintura se despegue de la madera.

Si deseamos que nuestra silla quede solo para adornar, los pasos son muy afines, solo que en esta ocasión, en vez de ofrecerle un aspecto mucho más nuevo, le nos encontramos dando un acabado poco mucho más "vintage".

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