El bronce se oxida con el agua

Te dejemos aquí arriba un gran vídeo explicativo en el que se limpian distintos materiales oxidados que contienen cobre.

En el primer experimento, se ha forzado la oxidación de un trozo de cobre para hacer el vídeo tutorial de la limpieza. Para el segundo ejemplo, se han usado una visagra y una barra de latón (aleación de cobre y zinc). Por último, un trozo de bronce (cobre y estaño).

Para todos los experimento se necesita: bicarbonato sódico, vinagro (para limpieza) y sal común.

Índice
  1. Aprende a eliminar el óxido del bronce
  2. De qué manera distinguir cobre, bronce y latón
  3. Usos del bronce
  4. ¿Cuáles son las ventajas del reciclaje?

Aprende a eliminar el óxido del bronce

La área de color rojo de un elemento de bronce supone la existencia de cuprita. No obstante, el contacto con el aire transforma de manera rápida el óxido de cobre en óxido de cobre o tenorita, provocando la aparición de color cobrizo obscuro o negro.

El bronce oxidado se restaura con desoxidantes particulares para metales.

De qué manera distinguir cobre, bronce y latón

El latón es una aleación de cobre y zinc, al tiempo que el bronce es una aleación de cobre y estaño.

El latón tiende a ser de un color amarillo dorado refulgente, en contraste al bronce, que tiende a ser de color mucho más obscuro.

Usos del bronce

La arquitectura es una industria donde el bronce se emplea primordialmente para elementos estructurales y de diseño. El bronce asimismo se usa para generar cojinetes gracias a su falta general de fricción y para contactos eléctricos.

El bronce es una alternativa habitual para hélices sumergidas, complementos y piezas marinas gracias a su resistencia al agua salobre, y para estatuas que tienen que aguantar la humillación en el momento en que se exhiben al aire libre. Tiene geniales características de moldeo y se puede dar forma de forma fácil en cojinetes, clips, conexiones eléctricas y otros muchos elementos.

¿Cuáles son las ventajas del reciclaje?

Reducción del impacto ambiental a través de la extracción de materias primas. Cuanto más reciclamos el metal, menos debemos tomar de la naturaleza. Así mismo, evitamos que se destroce el espacio natural y contribuimos a la sostenibilidad.

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